Alli estaba ella... Sólo sentia sus manos, su aroma, sus besos, embriagada por el veneno de su saliva... Alli estaba ella... presa del deseo, con las manos atadas y tensas, y el corazon atado a él.
Quizá las cuerdas en un poco hostil, pero creo que la venda es un instrumento maravilloso de erotismo creativo... si en vez de cuerdas son mas vendas para atar de forma sensual a tu amada... entonces el entorno se hace apasionante.
4 comentarios
german -
Verónica (Isis) -
y desnuda tu alma..
jcesar -
erotismo7 -
bravo de nuevo!!! Te tengo linkada