La casualidad

Nos encontramos por casualidad, nuestras miradas a penas se cruzaron,
pronunciamos unas sencillas palabras, casi olvidadas al instante,
unos nombres, unas caricias sutiles, nuestros rostros se rozaron
y buscamos un beso de esos en donde la lengua y las manos son protagonistas,
donde parecen estorbar las cabezas...
fué entonces cuando el acercarse dejó de existir, para fundirnos.
Algunas horas después o la mañana siguiente nos olvidamos.

PD Curiosamente, fué una noche inolvidable.

4 comentarios

[mijardindeorquidias - 27 de agosto de 2005 - 19:17]

mmm.... el cielo se convirtio en deseo, su apellido... el ocaso y... donde esta la continuacion? el efecto secundario de esos besos... que los añoro tanto??????....

me gustó leerte

[Jucar - 27 de agosto de 2005 - 12:06]

Así es la fuerza del deseo, a veces fugaz, pero que arrastra a caminos de perdición.

[monocamy - 27 de agosto de 2005 - 00:17]

JJJJJJJJuAAAAAAAAAAA!!!!
xDDDDDDDDDD

perdón... es que leí el primer comentario y me imaginé a leopoldo con una rodilla en tierra diciéndote esa frase, bandurria en mano.

xD

Leo, no te vayas a ofender, por favor ¿eh? estoy bromeando, quiero decir que parece una frase de un juglar, es una frase muy bonita :).

Y la foto también es muy bonita, parece un zoom cerrándose en forma de corazón.

besitos, mAm.
:**

[Leopoldo - 26 de agosto de 2005 - 23:53]

Por una coincidencia mi vida se ha llenado hoy de levedad y voluptuosidad. Y ambas, oh linda, son sorprendentes.